Última modificación: 2019-08-31
Resumen
Considerando que los procesos de autoevaluación y acreditación, los planes de mejoramiento y las políticas específicas diseñadas para el sector de la formación ingenieril, en la Argentina llevan más de 15 años de instalación, resulta de interés el estudio de los impactos a nivel de las instituciones, actores y beneficiarios de la mejora. De modo tal de comprender los sentidos, las direcciones que los procesos han tenido en distintas unidades académicas, así como el impacto de estas políticas específicas en los procesos formativos, curriculares, de enseñanza y de aprendizaje.
Teniendo en cuenta estos objetivos se realizó una investigación que tuvo como objetivos el análisis de los impactos de los procesos de acreditación y mejora de las carreras. Entre los hallazgos es posible observar que aún existen asignaturas pendientes. El haber alcanzado estándares mínimos de calidad no significa necesariamente que el desafío de la enseñanza de la ingeniería esté satisfecho, lo cierto es que resulta dificultoso atraer estudiantes que sigan estas carreras y aún quedan deudas tales como la alta cronicidad en los estudios, la dificultad para alcanzar la graduación, y el tipo de formación que finalmente se produce, las competencias efectivamente alcanzadas por los estudiantes, las modalidades de enseñanza, de evaluación, de vinculación con las prácticas profesionales, entre otros aspectos que aún requieren atención e intervención.
Los nudos (Oslak1981) críticos que dieron origen en 2002 a las políticas públicas vinculadas a la formación de ingenieros probablemente ya no se encuentren en igual estado de situación en la actualidad, cabe preguntarse entonces qué otros nudos han surgido en estos últimos años, que en un futuro desemboquen en nuevas políticas públicas relacionadas. Asimismo, el contraste con realidades vinculadas a la formación de ingenieros de otros países del mundo, puede resultar de interés de cara a comprender las direccionalidades que a nivel internacional configuran hoy un desafío para las carreras de ingeniería en la Argentina.
Con el fin de realizar un aporte a la reflexión y al cambio de paradigma formativo que la educación ingenieril requiere de caraca a una nueva década, se presenta un trabajo producto de la investigación realizada en 4 universidades públicas argentinas que abarcan el 49,9 % de la matricula estudiantil de ingeniería, cuyos resultados han permitido concebir un modelo pedagógico- curricular innovador y a la vez viable para encarar las reformas que permitan una transformación de las actividades formativas. En este sentido el trabajo pretende propiciar un conjunto de ideas clave que puedan ser insumo de nuevos direccionamientos de políticas públicas para la formación ingenieril.