Marisol Osorio y Manuel J. Betancur

Universidad Pontificia Bolivariana, Cir. 1 # 70-01, B11, Facultad de Ingeniería Eléctrica y Electrónica, Medellín

marisol.osorio@upb.edu.co

La formación enfocada a la adquisición de competencias, a través de un proceso cuya métrica se establece en unidades de créditos académicos, se ha convertido en el estándar formal en la educación en el país. La experiencia directa de los autores, al establecer contacto con los procesos académicos en una serie de instituciones colombianas de educación superior, indica que, en la práctica,  muchos de los procesos de transformación curricular que tienen por objetivo cumplir con este estándar son reformulaciones que no modifican la esencia de los procesos formativos, sino que se basan en los procedimientos tradicionales y les aplican las nuevas métricas.

En la Escuela de Ingenierías de la Universidad Pontificia Bolivariana se está llevando a cabo un esfuerzo por hacer una transformación curricular que parta de una declaración de competencias para establecer el dominio de las asignaturas y que defina el trabajo académico de manera que pueda enmarcarse desde su origen en una métrica de créditos académicos. Esto implica un cuidadoso planteamiento de las metodologías de enseñanza-aprendizaje, casi una revaluación de esos mismos conceptos; y la valoración de los procesos evaluativos, tanto desde la exigencia a los profesores para su definición y establecimiento, como desde el trabajo requerido por parte de los estudiantes, que sería lo que verdaderamente determine una medida de los créditos de cada asignatura.

Ante esos replanteamientos tan radicales, es posible que las directivas universitarias incurran en omitir la consideración de las demandas adicionales de recurso que se pueden requerir, dado que en la literatura normalmente sólo se reportan los beneficios, pero no el costo que conllevan los nuevos métodos. En particular, el tiempo de dedicación, tanto para el docente como para el dicente, pueden aumentar considerablemente. En este trabajo se propone estudiar abiertamente este asunto, y se explora una metodología para formalizar su respuesta. Se enuncian los resultados preliminares de la aplicación de una herramienta de medida del trabajo académico, tanto del estudiante como del docente, desarrollada por uno de los autores en estrecha colaboración con el cuerpo docente de la Facultad. Las conclusiones obtenidas se apoyan en consultas particulares dirigidas a grupos específicos de estudiantes del área de Automática y a profesores que cursan el curso Completo y Autónomo de Ambientes Virtuales de Aprendizaje del grupo de Educación en Ambientes Virtuales de la Universidad Pontificia Bolivariana. Los resultados se obtienen a partir del análisis de las metodologías magistral y virtual. En el caso magistral, se cuenta con una amplia experiencia que abarca décadas de trabajo docente y observación del estudiante. En el caso virtual, el análisis se ha centrado en casos particulares de algunos cursos en desarrollo, y de otros ya dictados.