La metalurgia extractiva desempeña una función trascendental en los procesos posteriores a la minería, de ello depende el valor agregado de un producto terminado al servicio de la industria. La investigación de procesos y de productos terminados en función de elevadas recuperaciones y alta eficiencia energética, se hace esencial para el desarrollo de metodologías alternativas, como el uso de carbón activado para obtención de oro, lixiviación con alcoholes y medios ácidos como sustituto de la piro-metalurgia para la recuperación de cobre y el planteamiento de modelos para la recuperación de tungsteno, hacen parte de la investigación del semillero de metalurgia extractiva enfocados en la necesidad de la industria minera del país.